📺 Documental 📺: "La clase de al lado"
En esta entrada del blog, voy a hacer una reflexión crítica y constructiva sobre un documental recomendando por los profesores de sociología. El nombre del documental es "La clase de al lado", por si a alguien le apetece verlo. A mi me ha resultado muy interesante, sobre todo porque te ayuda a enfocar las cosas desde otra perspectiva.
El documental comienza con la presentación de 7 alumnos que se han matriculado en Formación Profesional Básica de electrónica y electricidad. Todos ellos muestran un gran desinterés por el ámbito escolar y académico y alegan estar matriculados en ese curso por no tener otras opciones o no saber hacia dónde orientar su rumbo.
Una de las cosas que comentan los alumnos y, bajo mi punto de vista la más preocupante, es la inquina u odio que llegan a mostrar por los profesores de secundaria. ¿Sus motivos? Principalmente, el trato recibido por ellos y que “no les dan segundas oportunidades”, afirman algunos de los alumnos.
El documental se basa en un proyecto-taller de educación en el que los alumnos acuden a unas clases con Emma, una educadora, y el resto del equipo. Este proyecto se hace necesario debido a la violencia visible e invisible que hay en el ámbito escolar y que sufren estos alumnos, los cuales están criminalizados por el sistema y se les señala de manera constante como responsables y culpables de esta violencia. Pero ¿son ellos realmente los culpables? ¿O es el sistema el culpable y el que les condiciona su vida desde unas edades muy tempranas?
La mayoría de los alumnos siente decepción, cansancio, soledad, incomprensión… En general, sentimientos negativos muy fuertes. Debido a ello, se meten en un papel e interpretan a un personaje que nos les define. Digamos que adquieren un rol, normalmente de persona poco vulnerable, y llegan a mostrar una fortaleza que no tienen. Crean una coraza, muy dura y gruesa, casi nadie la puede atravesar y llega un punto que ni ellos mismos pueden abrirla, creando seres con una personalidad muy hermética. Temen ser juzgados a la hora de mostrar sus sentimientos y se encierran en ellos mismos.
El problema real está en el sistema educativo que se toma la licencia de clasificar a estas personas como problemáticas y llegar a excluirlos dándolo por perdidos. Realmente no son problemáticas, son adolescentes que utilizan violencia verbal como estrategia de supervivencia, simplemente porque no se entienden internamente y porque no saben gestionar sus emociones.
El beneficio que se saca de este taller es el hecho de generar espacios donde ellos se reconozcan íntegros con todas sus habilidades y emociones, donde puedan creer en ellos mismos y donde puedan ver el potencial que tienen. Lo ideal es formar un espacio de preparación para la vida, que brinde los recursos necesarios para vivir y donde se desarrollen personalmente. Gracias a ello, los alumnos se encuentran bastante animados, participativos y muestran gran interés por las actividades a realizar.
De cara a ser profesor, la conclusión que debemos sacar es que lo primero que tenemos que hacer con este tipo de alumnado es escucharlos y hallar la raíz de su problema, proporcionarles las herramientas adecuadas para que puedan solventarlo y, a partir de ahí, ayudarles a construir su futuro.
Y tú, ¿habías pensado alguna vez en esta situación desde tal enfoque?
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